Peter Hakim, del Inter-American Dialogue: “La estrategia de Trump es mantener a su base unida y esperar un error de Biden”

"Lo he dicho desde el principio: no hay que subestimar a Donald Trump cuando está en una pelea callejera. Él puede. Tiene un gran talento para ganar", asegura Peter Hakim, presidente emérito y senior fellow del Inter-American Dialogue.

Comentando las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo en noviembre en Estados Unidos, el experto afirma que el mandatario "hará todo lo posible por mantener el 40% de apoyo que tiene y que ha estado con él durante casi todo su mandato".

"Necesita sumar unos nueve puntos, pero su estrategia es aferrarse a ese 40%, mantenerlos entusiasmados para que salgan a votar por él. Su estrategia es mantener a su base unida y esperar un error de Joe Biden o un repunte de la economía" post pandemia, asegura a DF.

Hakim participará junto a José Miguel Insulza en el webinar "Elecciones en EEUU: Perspectivas para Chile y América Latina", que se llevará a cabo este lunes y que es organizado por la Fundación Chilena del Pacífico.

- ¿Cómo está el ambiente electoral en EEUU, se ha visto desplazado de la atención pública por la pandemia del Covid-19?
- No, la elección está muy presente en la mente de todos aquí. El país está polarizado. La elección en sí misma es más un referéndum sobre Donald Trump que una competencia entre Trump y Joe Biden. Las personas están en contra de Trump o favor de él. Y obviamente, la pandemia ha influido mucho y ahora se ha convertido en parte de las elecciones, en parte porque la respuesta de EEUU fue tan incompetente que los resultados fueron terribles para el país. Claramente, Trump ha perdido mucho terreno en los últimos tres meses.

- Entonces se podría decir que la pandemia ha sido un punto de inflexión para las elecciones...
- Si bien aún no lo sabemos porque no sabemos el resultado, da la impresión en este momento de que Biden tiene una ventaja bastante grande en la votación. Lidera a nivel nacional por unos 10 puntos sobre Trump. En nuestro colegio electoral especial hay cinco o seis estados que son llamados "pendulares" y en cada uno de ellos, los que marcarán la diferencia, Biden lidera por entre tres y ocho puntos. Entonces, las encuestas sugieren que Biden en este momento está considerablemente por delante y esto se produjo después del impacto de la pandemia, a fines de junio en realidad, que se produjo la gran diferencia.

Fortalezas de Trump

- ¿Cuáles son los temas principales de la campaña?
- En este momento, esta no es una campaña que se base en temas. De hecho, no es una competencia, es un referéndum que Trump estaba ganando por dos factores importantes. Primero, daba la impresión de ser el más fuerte personalmente, la persona que podía hacer que las cosas sucedieran. E incluso si eran cosas que uno no hubiera preferido, él podía hacerse cargo, podía tomar el control. Era más poderoso, preciso y carismático que Biden. Y en segundo lugar, la economía. A EEUU le estaba yendo bien y ciertamente mejor que a casi todos los demás países desarrollados. Trump sacó tanta ventaja como pudo. Pero ahora ha dado instrucciones que suenan contradictorias. No ha sido un líder fuerte durante la pandemia. De hecho, ha rechazado el liderazgo de la pandemia. Y la economía, por supuesto, está sintiendo el impacto, la caída del empleo es muy grande. El número de personas sin trabajo es enorme. Industrias enteras están siendo afectadas. Por eso, cada vez más personas han pasado de la indecisión a apoyar a Biden. Los mismos índices de aprobación a Trump le han bajado mucho.

- ¿Qué papel va a jugar China en este escenario?
- Hasta ahora, no creo que haya jugado un papel relevante, a pesar de la creciente intensidad de las tensiones entre EEUU y China. No sabemos cuál será la estrategia de Trump, pero es posible imaginar que pueda tratar de impulsar un conflicto más intenso y más agresivo con China y decir que necesitamos un líder fuerte y poderoso que nos guíe durante un período de tensiones. Pero hasta ahora, las relaciones con China aún no han sido un problema importante. A él le gustaría que fueran un tema. Pero el gran tema en realidad ha sido su gestión de la pandemia y las diversas y múltiples protestas de la comunidad afroamericana en contra del abuso policial.

El apoyo a Biden

- ¿Será la comunidad afroamericana una gran base para Biden?
- Sin duda. Las encuestas muestran que Biden está capturando un 85% del voto afroamericano. Y, por supuesto, fue el voto afroamericano el que lo llevó a donde está ahora como candidato presidencial del Partido Demócrata. Le fue muy mal en tres elecciones primarias. Pero cuando fueron a Carolina del Sur ganó abrumadoramente y cambió el tenor de las elecciones.

- ¿Y cuál cree que será el papel de la comunidad latina en este contexto?
- La comunidad hispana estuvo dividida en cierta medida durante los años de Obama y en las elecciones de Hillary Clinton. Los latinos votaron en gran medida por el candidato demócrata, cerca de un 70%. Pero fueron en su mayoría personas provenientes de México y de América Central. Cuando te diriges a Florida, que es uno de los estados pendulares, los cubanos están mucho más divididos. Sorprendentemente, los votos ahora están 50/50 para Biden y Trump en la comunidad latina. Pero Biden está adelante en las encuestas nuevamente en Florida. Hay varios estados en donde los latinos hacen una gran diferencia. Florida es clave, pero también hay una alta presencia en California, Colorado, Arizona, Nuevo México y Texas, y la mayoría de esos estados parecen inclinarse hacia el lado demócrata. Texas probablemente votará por Trump, y Arizona es un estado pendular, que Biden está liderando.

- ¿Qué podemos esperar para estos cuatro meses? No queda mucho tiempo para las elecciones...
- No. Pero no toma mucho tiempo cambiar las cosas políticamente. Creo que hay sólo dos cosas que podrían redibujar realmente las elecciones y convertirlas en una victoria de Trump. Una de ellas es que Biden cometa un gran error. Se expresa mal, es más lento que antes, así es que podría fácilmente cometer un error grave. La otra es un rebote muy rápido de la economía. En otras palabras, que por alguna razón los próximos dos o tres meses comencemos a ver que la economía se recupera rápidamente y Trump diga que "esto ya empezó, lo podemos impulsar". Esos son los dos temas centrales. Si nada de eso pasa, podría ser algo externo. Que Kim Jong-un de Corea del Norte pueda enviar un misil, lo que podría significar una ruptura total con China. Algo muy importante en las relaciones internacionales podría crear un factor de miedo.